lunes, 12 de septiembre de 2016

"La vuelta del malón", de Ángel Della Valle

 ​La vuelta del malón fue celebrada como la “primera obra de arte genuinamente nacional” desde el momento de su primera exhibición en la vidriera de un negocio de la calle Florida (la ferretería y pinturería de Nocetti y Repetto) en 1892. Pintado con el expreso propósito de enviarlo a la exposición universal con que se celebraría en Chicago el cuarto centenario de la llegada de Colón a América, el cuadro fue la obra más celebrada de Della Valle.

Presentaba una escena que había sido un tópico central de la conquista y de la larga guerra de fronteras con las poblaciones indígenas de la pampa a lo largo del siglo XIX: el saqueo de los pueblos fronterizos, el robo de ganado, la violencia y el rapto de cautivas.
El cuadro de Della Valle entroncaba con una larga tradición no solo en las crónicas y relatos literarios inspirados en malones y cautivas, sino también en imágenes que, desde los primeros viajeros románticos europeos que recorrieron la región en la primera mitad del siglo XIX, representaron cautivas y malones.
 La vuelta del malón fue, entonces, la primera imagen que impactó al público de Buenos Aires referida a una cuestión de fuerte valor emotivo e inequívoco significado político e ideológico. Según una entrevista al artista en agosto de 1892, el asunto del cuadro se inspiraba en un malón llevado por el cacique Cayutril y el capitanejo Caimán a una población no mencionada. Otro comentario (en el diario Sud-América) ubicaba el episodio en la población de 25 de Mayo.

Pero más allá de la anécdota el cuadro aparece como una síntesis de los tópicos que circularon como justificación de la “campaña del desierto” de Julio A. Roca en 1879, produciendo una inversión simbólica de los términos de la conquista y el despojo. El cuadro aparece no solo como una glorificación de la figura de Roca sino que, en relación con la celebración de 1492, plantea implícitamente la campaña de exterminio como culminación de la conquista de América. Todos los elementos de la composición responden a esta idea, desplegados con nitidez y precisión significativa.



La escena se desarrolla en un amanecer en el que una tormenta comienza a despejarse. El malón aparece equiparado a las fuerzas de la naturaleza desencadenadas (otro tópico de la literatura de frontera). Los jinetes llevan cálices, incensarios y otros elementos de culto que indican que han saqueado una iglesia. Los indios aparecen, así, imbuidos de una connotación impía y demoníaca. El cielo ocupa más de la mitad de la composición, dividida por una línea de horizonte apenas interrumpida por las cabezas de los guerreros y sus lanzas. En la oscuridad de ese cielo se destaca luminosa la cruz que lleva uno de ellos y la larga lanza que empuña otro, como símbolos contrapuestos de civilización y barbarie. En la montura de dos de los jinetes se ven cabezas cortadas, en alusión a la crueldad del malón. En el extremo izquierdo se destaca del grupo un jinete que lleva una cautiva blanca semidesvanecida, apoyada sobre el hombro del raptor que se inclina sobre ella. Fue este el fragmento más comentado de la obra, a veces en tono de broma, aludiendo a su connotación erótica, o bien criticando cierta inadecuación del aspecto (demasiado “civilizado” y urbano) de la mujer y de su pose con el resto de la composición.

La vuelta del malón fue llevada a la Exposición Colombina de Chicago, en medio de la desorganización y dificultades que rodearon ese envío oficial. Fue exhibida en el pabellón de manufacturas, como parte del envío argentino, junto a bolsas de cereales, lanas, cueros, etc. Los pocos comentarios que recibió se refirieron a la escena representada como una imagen de las dificultades que la Argentina había logrado superar para convertirse en una exitosa nación agroexportadora.

 La familia del artista optó por donarla a la Sociedad Estímulo de Bellas Artes tras su muerte en 1903.

Malo,  Laura : Comentario sobre "La vuelta del malón" en https://www.bellasartes.gob.ar/coleccion/obra/6297 (RESUMEN)

sábado, 7 de mayo de 2016

El "macartismo" y el cine como propaganda en la Guerra Fría




El siguiente video, elaborado por un estudiante de Sociología, resume el impacto que la Guerra Fría tuvo y tiene en la cinematografía yanqui.


lunes, 2 de mayo de 2016

La Guerra Fría y el mundo bipolar


En esta entrada encontrarán datos generales acerca la configuración del mundo en la bipolaridad de la Guerra Fría, las instituciones internacionales que surgen para consolidar las alianzas con las naciones hegemónicas, y algunos ejercicios para anticipar la angustia pre- examen... JA-JA.


Hasta la diapositiva N° 34, correspondería a la Unidad II de nuestro programa.






EJERCICIOS DE REPASO

Tengan en cuenta que muchas de las cuestiones aún no las hemos estudiado, de modo que no caigan en depresión si no pueden resolver la totalidad de los test...

http://www.historiasiglo20.org/quizzes/GF.htm

http://www.educaplay.com/es/recursoseducativos/2372787/guerra_fria_.htm

http://www.educatina.com/guerra-fria/ejercicios/guerra-fria-origen-del-conflicto


Y además...

Den una ojeada a los documentales sobre los conflictos en China, Japón y Corea.

La puja de EEUU y la URSS por el poder en Oriente

LA FORMACIÓN DE LA REPÚBLICA POPULAR CHINA



LA RECONSTRUCCIÓN DEL JAPÓN DE POSGUERRA

Sugiero prestar especial atención al relato a partir del minuto 25:50.




LA GUERRA DE COREA

domingo, 10 de abril de 2016

Los grandes filósofos políticos de la Ilustración

Los más destacados representan­tes del movimiento filosófico polí­tico del siglo XVIII fueron tres escritores franceses: Montesquieu, Voltaire y Rousseau.

Montesquieu, retrato anónimo del siglo XVIII.

Montesquieu (1689-1755): Charles de Secondat, barón de Montesquieu, descendía de una noble familia de magistrados y ocupó altos cargos en el parlamento de Burdeos. En 1721 publicó las “Cartas Persas”, há­bil sátira en la que un viajero per­sa censura con agudeza el absolu­tismo francés.
Montesquieu viajó por Europa y residió dos años en Inglaterra, lap­so que aprovechó para estudiar la organización política y social de ese país [1].
En 1748 editó su obra maestra, titulada El espíritu de las leyes, después de trabajar en ella veinte años.
 
Portada de la primera edición de "El Espíritu de las Leyes". En ella no figura el nombre del autor.
  En esta obra expuso su teoría sobre una posible organización política de los países. Expresó su desacuerdo con la tradicional división de los gobiernos formulada por Aristóteles en el siglo IV a.C. (monarquía, aristocracia, de­mocracia).
  En una nueva clasifica­ción, Montesquieu los distingue como monárquicos, republicanos y despóticos. Negó que existiera una forma de gobierno uni­versal adaptable a todos los pueblos, por cuanto las instituciones políticas y sociales de un Estado dependen de va­riados factores que influyen sobre sus leyes: históricos, sociales, geográficos, etcétera.
Admirador del régimen inglés, se in­clinó hacia la monarquía parlamenta­ria, basada en el honor (la nobleza) y controlada por las leyes.

Enemigo de la opresión y del despo­tismo, enunció su famosa teoría sobre la separación de poderes:
- el ejecutivo, en la persona del rey, quien hace cum­plir las leyes;
- el legislativo, encargado de redactarlas, debe recaer en una Cá­mara de la nobleza (análoga a la de los Lores) y otra de representantes, de la que deben excluirse los pobres;
- el judicial, que debe ser totalmente independiente, única forma de que pueda proteger los derechos de los individuos contra las arbitrarieda­des de los otros dos poderes.

La separación de poderes tuvo gran influencia posterior, por cuanto la adoptaron los constituyentes americanos y los gobiernos franceses que siguieron a la Revolución.

Voltaire, copia de busto de Jean-Antoine Houdon (1778, Fundación Thomas Jefferson)
  Voltaire (1694-1778). Es el seu­dónimo que utilizó François Marie Arouet. De origen burgués, se destacó desde temprana edad por su facilidad para las letras, y a través de su larga vida escribió novelas, poemas, obras de teatro y abundante material filosófico.
Ingenioso y polemista, sus pri­meros trabajos literarios le origina­ron conflictos con la nobleza; fue encarcelado en la Bastilla y luego se exilió en Inglaterra, donde las instituciones y la política religiosa del país despertaron su admiración.
A su regreso publicó las Cartas Filosóficas, en las que criticó el régimen imperante en Francia; por eso fue perseguido y tuvo que radi­carse en Lorena, más tarde en Postdam- donde fue huésped del rey Fede­rico II-, y por último, en la fron­tera franco-suiza. Hasta su muerte, ejerció un predominio intelectual sobre toda Europa.

Voltaire fue un crítico mordaz, agresivo, po­lemista e ingenioso. Profundo admira­dor de las instituciones inglesas, de­fendió con todo vigor la libertad indi­vidual e inició una "lucha general contra toda autoridad". Profesaba el deísmo y creía en la inmortalidad del alma. Con múl­tiples escritos atacó al clero y a la monarquía absoluta.
Como ha dicho un autor [2]: "Su anti­clericalismo fue feroz y convirtió en una verdadera manía su aversión a la Compañía de Jesús".
En sus ideas políticas estuvo lejos de ser un demócrata. Concibió al gobierno "como un mal necesario" y se mostró partidario de una monarquía ilustrada o una república dirigida por la burgue­sía. En este último aspecto conviene destacar que Voltaire temió siempre al elemento popular, probablemente por una posible reacción ante sus ataques contra la Iglesia.

Rousseau, busto de Jean-Antoine Houdon (1779, Museo del Louvre)
 Rousseau (1712-1778). Juan Jacobo Rousseau nació en Ginebra. Hijo de un relojero francés, creció en me­dio de abandono e indiferencia; su humilde origen le obligó a ejercer diferentes oficios.
De talento superior, inquieto y voluntarioso, llevó una vida aven­turera y bohe­mia. Sufrió muchas humillaciones, por esto despreció la sociedad y amó la Naturaleza.

En esas épocas, Ginebra era una pe­queña república, de mínima importancia. Rousseau pasó la mayor parte de su vida en Francia, admirando siempre los paisajes de su tierra.
Tenía treinta y siete años y no había logrado destacarse como pensador y escritor. En octubre de 1749 Rousseau ganó el concurso de la Academia de Dijón y alcanzó celebridad con un trabajo sobre el tema “Si el progreso de las cien­cias y artes había contribuido a corrom­per o a purificar las costumbres”.[3]

Expuso sus doctrinas políticas en el Contrato Social (1762), obra que ejerció poderosa influencia en las generaciones posteriores. En ella afirma que el hombre vivió originariamente en estado natural, lo que significó que todos eran libres e igua­les en derechos. Al aparecer la propiedad privada surgieron las diferentes formas de desigualdad social, y entonces la única posibi­lidad de establecer una comunidad feliz, es ceder los derechos indivi­duales a la colectividad política (Estado) por medio de un "contra­to social". En esta forma, cada in­dividuo conviene con los demás en someterse a la voluntad de la ma­yoría.
Por lo tanto, el Estado es el re­presentante de la soberanía popu­lar y el régimen perfecto de gobierno sería la democracia directa.

En otra obra titulada “Emilio” (1762) critica los métodos educa­tivos de su época y propicia el sis­tema espontáneo, basado en la libertad del niño y en su propia experiencia. Rous­seau expuso sus vicios, defectos y virtudes en las “Confesiones”, traba­jo de sorprendente sinceridad acerca de su vida.

FUENTE:
COSMELLI IBÁÑEZ, JOSÉ: Historia moderna y contemporánea, 15ª ed., Bs. As., Troquel, 1968, pp. 254- 257 (adaptación)
Los clásicos no pasan de moda.

Por último, un inefable video elaborado por estudiantes de la Universidad Monte Ávila. La deplorable pronunciación del francés le arrancará carcajadas a más de uno (yo no pude contenerme, francamente). Pero el contenido está bastante bien, y los relatores derrochan entusiasmo...








[1] Muy conforme, dijo a su regreso: "Inglaterra es el país más libre que existe en el mundo, porque el príncipe no tiene el poder de hacer el menor daño a nadie, en razón de que su poder está limitado e inspeccionado por otro. Aun cuando un individuo tuviera en Inglaterra tantos enemigos como pelos en la cabeza, no le sucedería nada".
[2] Cosmelli Ibáñez no cita la fuente.
[3] Escribe Rousseau: "No, el progreso no ha mejorado al hombre. El hombre primitivo vivía feliz e inocente. El hombre es naturalmente bueno. La civilización (progreso de las ciencias y las artes) tan solo ha proporcionado satisfacciones sensuales, estimulando el egoís­mo y organizando la explotación social".
En 1754 envió a la Academia de Dijón una segunda memoria, titulada la Desigualdad humana. Además, remitió un ejemplar a Voltaire y éste le contestó: "He recibido vuestro libro contra el género humano, y creo que agradará a las gentes, aunque sin corregirlas. No se puede pintar la sociedad en colores más sombríos, ni nunca se ha empleado tanto ingenio, en desear que nos convirtamos en bestias. Leyendo vuestro libro, dan ganas de andar a cuatro patas. Desgraciadamente, hace ya sesenta años que perdí esta costumbre y dejo por lo tanto la posición natural (de cuadrúpedo) a los más dignos de ella que vos y yo".

sábado, 9 de abril de 2016

La "Gran Guerra" for dummies

Este inefable video realizado por los muchachos de www.bullymagnets.com, es una verdadera genialidad mnemotécnica, usa todos los trucos visuales necesarios para explicar con claridad las complejas alianzas y motivaciones que desataron el primer conflicto bélico de escala mundial en la historia.
Para que repasen los vagonetas.


P.D.: Sugiero calurosamente visitar la página "Bully Magnets- Historicum Conocimentum Nerdus". La red tiene sus perlitas, y vale la pena disfrutarlas.

viernes, 8 de abril de 2016

Las nuevas ideas económicas del siglo XVIII

Hasta mediados del siglo XVIII, el mercantilismo [1] era el sistema económico imperante en Europa.
En la segunda mitad de esa centuria algunos escritores, compenetrados de la filosofía ilustrada, formularon nuevas ideas. Fueron los economistas, cuyas teorías eran similares a las de los filósofos políticos, por cuanto postularon:

- reducir al mínimo la intervención del Estado en la economía y
- conceder al individuo la máxima libertad de trabajo y de comercio.

Los economistas partidarios de las nuevas doctrinas se agruparon en dos principales escuelas: la fisiócrata [2] y la liberal.

Los fisiócratas.

Los fisiócratas trataron de demostrar la preeminencia de la agricultura sobre el comercio y la industria, pues sostenían que solo la tierra, la Naturaleza, es la fuente del progreso económico.
Además, afirmaron que las sociedades humanas están regidas por un "orden natural" y, por tanto, rechazaron la intervención del Estado y defendieron la "libertad de acción".
Los economistas franceses Quesnay y Gournay son los principales representantes de la escuela fisiocrática.

 Quesnay por Jean Godard Chevallier
(1745, Palacio de Versalles Centro de Investigación)
François Quesnay
(1694-1774)

Médico de Luis XV, expuso los fundamentos de la nueva escuela en su obra titulada El cuadro económico.

"La tierra- escribe- es la única fuente de todas las riquezas, porque el cultivo de la tierra produce todo lo que puede desearse... Pobres labradores, reino pobre. Reino pobre, rey pobre".

Conviene destacar que por labradores entiende a los contratistas que hacen trabajar a los obreros.


Vincent de Gournay
(1712-1759)

Discípulo del anterior, consideró a la industria- además de la tierra- como fuente de riqueza.
Reclamó la abolición de todas las trabas impuestas por el Estado a las actividades económicas, pues sostuvo que el gobierno debe limitarse a contemplar impasible la libre competencia. Formuló una famosa frase que resume no solo su doctrina, sino la de todos los fisiócratas:

"Dejen hacer y dejen pasar; el mundo camina solo." [3]



Los liberales. 

La escuela liberal, que también se conoce con el nombre de "clásica" o "individual", reconoce como fundador al profesor escocés Adam Smith (1723-1790).
Adam Smith en el billete de 20 libras, Banco de Inglaterra.
En su famosa obra titulada La riqueza de las naciones, sostuvo que el trabajo, en cualquiera de sus aspectos, es la única fuente de riqueza.
Consideró que la economía está regida por leyes naturales, que el hombre no puede ni debe modificar. Criticó al mercantilismo y culpó de su fracaso a las trabas impuestas por la intervención del Estado.
Bregó por asegurar al individuo la más amplia libertad de trabajo (por eso se llamó escuela liberal), única forma de garantizar el éxito de su acción.
Desde su punto de vista, la desigualdad económica entre los individuos (pobres y ricos), es consecuencia del "orden natural",  y es también factor de progreso, por cuanto origina una lucha de igualación.
Las doctrinas de Adam Smith ejercieron una gran influencia en los siglos XVIII y XIX y valieron a su autor el título- un tanto exagerado- de "Padre de la Economía Política".

FUENTE:
COSMELLI IBÁÑEZ, JOSÉ: Historia moderna y contemporánea, 15ª ed., Bs. As., Troquel, 1968, pp. 257- 259. (adaptación)
Los clásicos no pasan de moda.



[1] Sistema económico en el cual los metales preciosos constituyen la riqueza esencial de los Estados. El mercantilismo se desarrolló en los siglos XVI y XVII como consecuencia de los descubrimientos de minas de oro y plata en América; el mercantilismo consideraba que el comercio de exportación debía superar al de importación para evitar la salida del país de metales preciosos".
[2] El término deriva de dos palabras griegas (fysis y cratos) y significa "gobierno de la naturaleza".
[3]  “Laissez faire et laissez passer, le monde va de lui même.”

miércoles, 6 de abril de 2016

Hiroshima: cuando la Tierra conoció el infierno

"La gente dice que cuando uno se muere se va al cielo o al infierno, pero yo no creo eso. El infierno estaba allí aquel día". 
Hiroko Harris, superviviente de Hiroshima
 

El acontecimiento que marcó el final de la Segunda Guerra Mundial y el inicio de la Guerra Fría


La mañana del 6 de agosto de 1945 era tranquila y cálida. El doctor Michihiko Hachiya había pasado muchas noches sin dormir atendiendo heridos en el hospital y escuchando las alarmas aéreas.
Japón estaba en guerra. Una guerra en la que había empezado arrasando y ahora perdía. A las 8.16 horas el doctor Hachiya miraba por la ventana los reflejos del sol en su jardín, cuando a un fuerte resplandor le siguió otro. Por un instante todo brilló como el magnesio, y a continuación el sol se oscureció.
Cuando tuvo conciencia de lo que empezaba a pasar esa mañana de agosto, el doctor Hachiya inició la huida de su casa derrumbada mientras descubría que su labio inferior estaba casi totalmente desprendido y que tenía un cristal clavado en el cuello. La ropa que llevaba puesta se había evaporado y el cuerpo estaba cubierto de heridas.
"Nos salvaremos", le dijo a su esposa. “Solo tenemos que salir de aquí lo antes posible". Buscaron la calle y en la huida él pisó un cadáver al que le pidió disculpas histéricamente. Pero al llegar a lo que había sido la calle descubrieron que había solamente ruinas y polvo. "No permanecía nada en pie, excepto unos pocos edificios", recordaría luego el doctor Hachiya en su “Diario de Hiroshima”.

Lo que el doctor Hachiya y otros supervivientes veían desde tierra era confirmado en ese momento por la tripulación de un bombardero norteamericano B-29. A las 8.12 horas, el artillero Thomas Ferebee le comunicó al piloto Paul Tibbets que la ciudad estaba en su objetivo.

Tripulación del B-29 "Enola Gay" (Foto de Associated Press)
Llegaba a su fin el Proyecto Manhattan, con un costo de 2.000 millones de dólares.
El 16 de julio de 1945 se había experimentado la primera bomba atómica en Álamo Gordo, Nuevo México. Un grupo de científicos pidió entonces al Gobierno de Estados Unidos que no la utilizase en contra de los japoneses sin hacerles una demostración.
Durante dos meses Tibbets se preparó para la misión. Bautizó "Enola Gay" al avión, dado que era el nombre de su madre, y seleccionó a la tripulación.



Cuando tuvo en la mira el hospital Shima, y "Deak" Parsons, el físico que armó la bomba en vuelo, le comunicó que todo estaba en orden, Tibbets la dejó caer.
"Vi el resplandor", dijo años después en una entrevista, "y sentí gusto a amalgama en la boca. Fue una sensación extraña y desde entonces quedé convencido de que la bomba atómica tiene gusto a amalgama".
Bomba atómica sobre Hiroshima. Foto del Museo Memorial de la Paz, Hiroshima.
Dos minutos después de la explosión, mientras el hongo crecía, Paul Tibbets sobrevoló Hiroshima y descubrió que había desaparecido.

Tres días más tarde, el infierno azotaría Nagasaki.

Las víctimas

Hiroshima tenía 250.000 habitantes. En los primeros dos minutos murieron alrededor de 60.000 hombres, mujeres y niños; otros 100.000 resultaron heridos. La mayor parte se desintegraron por la bola de fuego y el resto murió debido a la presión y a los vientos de fuego, además de los derrumbes. En un segundo la temperatura subió a 3.000 grados centígrados. Se calcula que el total de víctimas fue de 200.000 personas.

En el curso de las semanas siguientes los supervivientes notaron la aparición de pecas en la piel -en realidad, centenares de pequeñas hemorragias-, a las que se sumaron vómitos, fiebre y sed. Los glóbulos blancos se redujeron, mientras comenzaban las hemorragias intestinales, la diarrea y la pérdida del cabello.



Los hombres supervivientes descubrieron que se volvían estériles y a las mujeres se les afectó el ciclo menstrual. El cáncer, la ceguera, la leucemia y las malformaciones en los descendientes fueron moneda común.
Hiroshima tenía 298 doctores, pero 270 murieron en la explosión. De las 1.780 enfermeras solo quedaron vivas 135. Y de los 45 hospitales permanecieron en pie tres. La señora Harris se ha sometido desde 1945 a 36 operaciones para reconstruir su rostro. Otra mujer recuerda que "tenía la cara tan deformada y cambiada que la gente no sabía quién era".

50.000 cabezas nucleares

La bomba de fisión arrojada sobre Hiroshima, y la que se lanzó sobre Nagasaki el 9 de agosto, causando cerca de 40.000 muertos, tenían una potencia de 12 kilotones y medio -un kilotón es igual a 1.000 toneladas de TNT-.

En la actualidad, a este tipo de bombas se las considera pequeñas, tácticas, y de menor importancia. El mundo cuenta hoy con 50.000 cabezas nucleares, o sea, 1.600.000 veces la capacidad de la bomba de Hiroshima, o el equivalente de 20.000 millones de toneladas de TNT. El discurso de la guerra nuclear ha llegado, sin embargo, a especular con guerras nucleares limitadas y con armas como los misiles Cruise y Pershing II, de primer golpe, y a afirmar que sería posible lanzar una guerra nuclear y ganar y sobrevivir, de todas formas. "Hiroshima no debe ocurrir nunca, jamás, en ninguna parte", dice uno de los supervivientes.

En 1971, el premio Nobel de la Paz, Philip Noel-Baker, anunció que las superpotencias tenían ya una capacidad como para eliminar más de cuatro veces a toda la humanidad. Pero hay quienes no temen a la bomba; Eugene Rostow, ex director de la Agencia para el Desarme y Control de Armamentos de Estados Unidos, declaró: "Después de todo, Japón no solo sobrevivió al ataque nuclear, sino que floreció".

La explicación oficial

La explicación oficial que dio el Gobierno de Estados Unidos fue que se arrojó la bomba para salvar las muchas más vidas que costaría vencer a Japón mediante una invasión.
El físico P. M. S. Blackett, analizando las secuencias históricas,- que van desde la reunión de Truman, Churchill y Stalin en Postdam (julio de 1945) a la promesa de la URSS de declarar la guerra a Hirohito (el 8 de agosto), la explosión de Álamo Gordo (el 16 de julio) y la preocupación que sentía Washington por la fuerte presencia del Ejército Rojo en Europa-, llegó a la conclusión de que la bomba de Hiroshima no fue "ni de lejos, el último suceso de la Segunda Guerra Mundial, sino la primera gran operación de la Guerra Fría diplomática con Rusia".
El delegado del Plan Marshall en el Reino Unido, Thomas Finletter, explicó en 1946 que podría haberse hecho una demostración a los japoneses de los efectos de la bomba, pero que había una gran urgencia por obtener la rendición de Japón a Washington antes de que Stalin declarase la guerra. Una demostración, dijo, "hubiese consumido mucho tiempo en preparativos".
Por su parte, Vannebar Bush, director del Comité para la Investigación de la Defensa Nacional de Estados Unidos, afirmó que la prisa por arrojar la bomba se debió a que "así no fue necesario hacer ninguna concesión a Rusia al final de la guerra".
"Algunos estaban preocupados por los kamikazes", escribió el historiador Stephen E. Ambrose, "otros querían castigar a los japoneses por Pearl Harbour, y estaban aquellos que pensaron que la única forma de justificar ante el Congreso y los ciudadanos norteamericanos el gasto de 2.000 millones de dólares en un proyecto secreto era arrojando la bomba". Y añade: "La vida era algo sin valor en el mundo de 1945. Las fuerzas angloamericanas habían matado centenares y centenares de mujeres y niños en incursiones aéreas europeas que no tenían un objetivo militar preciso. Matar unos pocos japs más parecía natural; y no se debe olvidar el factor racial".


FUENTE:
AGUIRRE, MARIANO: "El resplandor de Hiroshima" en diario “El País”, España, 7 de agosto de 1983.
Fotografías e ilustraciones agregadas para el post.

domingo, 3 de abril de 2016

Wiki: Personajes de los años de la "Guerra Fría"

Estimados estudiantes de 5° año, tal como les anticipé, aquí va el primer desafío de la "etapa 2.0" de este curso.
Elaborarán una wiki...

(Cuando paren de llorar, sigan leyendo...)

Para poder participar, deberán crear una cuenta en google, aquellos que aún no la tengan.
Los que ya la tienen, pasen y vean.
A medida que me envíen sus direcciones de e-mail, los invitaré a participar y podrán elegir un personaje y comenzar a trabajar.

https://sites.google.com/site/personajesguerrafria/

¡Avanti! ¡¡¡ÉXITOS RESONANTES!!!!


TALLER: EL MUNDO DURANTE LA GUERRA FRÍA

Mapas de la Guerra Fría

lunes, 14 de marzo de 2016

Bibliografía 5° HyCS- 2016

Mis estimados, aquí encontrarán la bibliografía que usaremos este año.
Para simplificar, les comparto la carpeta donde está todo el material de lectura. Uds. pueden descargar lo que necesiten.
Que lo disfruten.





René Magritte, El Imperio de las Luces II (1950)